Como empresas de mantenimiento de piscinas sabemos que una de las mayores preocupaciones de nuestros clientes es la seguridad. En los meses de verano, la piscina es uno de los elementos fundamentales de diversión y para que ésta no se vea empañada es importante seguir una serie de precauciones para evitar accidentes.
Tomes nota y estés atentos ahora que se inicia la temporada de verano.
Principales accidentes en las piscinas:
· Traumatológicos: Caídas por correr en la orilla de la piscina y realizar actividades riesgosas en el agua.
· Dermatológicos: Quemaduras por el sol o daños en la piel por el cloro de la piscina. Use bloqueador y dúchese después del baño.
· Digestivos: Puntadas a la guata, que se pueden transformar en calambres, por comer y meterse al agua al toque.
Hay que tener un especial cuidado con los niños y no perder los de vista. Nuestras recomendaciones:
· No dejar solos a los niños en una bañera, piscina o lugar de riesgo.
· Tras comer, se debe esperar un mínimo de dos horas para bañarse.
· Habilitar rejas seguras con alturas superiores a 1,5 metros en piscinas caseras.
· Evitar que se hagan actividades riesgosas como “chinitas” o tirarse “piqueros”.
· Enseñe a nadar a sus hijos desde los dos años.
· A los niños que no sepan nadar, póngale flotadores o salvavidas.
· Es recomendable que los adultos se capaciten en técnicas de reanimación.
Hay que ser muy insistente en que los niños que aún no sean capaces de nadar con soltura siempre que vayan a meterse en el agua se coloquen los manguitos, el chaleco o cualquier otro sistema que les ayude a mantenerse a flote, aunque vayan a bañarse en las zonas poco.