¡Ya llega el calor! Después de los días que hemos tenido parece que el verano se va acercando. ¡Por fin! El buen tiempo, una barbacoa en la piscina, una cervecita, amigos… ¿Y qué mejor que una buena barbacoa para celebrarlo?
En las reuniones familiares y de amigos tienen muchas veces como protagonistas las brasas de la barbacoa y la piscina. Hoy te vamos a dar los 10 trucos imprescindibles para convertirte en el rey de las barbacoas.
1. Cuantos van a venir a la barbacoa (BBQ)
Lo primero a la hora de realizar una barbacoa en la piscina es saber con exactitud el número de personas que se van a reunir. La cantidad ideal para que ni sobre ni falte comida es comprar entre 350 y 400 gramos de carne por persona. En esta cantidad hay que tener en cuenta tanto los entrantes, como chorizo o panceta, y las carnes principales, como las costillas o las chuletas.
2. Preparación de la carne y verduras
La carne debe mantenerse a temperatura ambiente durante una hora o más antes de ser asada. De esta forma conseguiremos que las piezas suden un poco y se cocinen mucho mejor.
Las verduras constituyen un buen complemento aportando una gran variedad de sabores, especialmente patatas, cebollas o tomates. Y para combatir el calor, la cerveza fría con limón, los refrescos o el tinto de verano se convierten en imprescindibles.
3. Las brasas perfectas
Las brasas ya maduras, blanquecinas o grisáceas, la parrilla no muy cerca de las brasas y tiempo para hacer lentamente las carnes hasta que estén en su punto. Si no lo hacemos así, la carne se quemará demasiado por fuera y sin embargo, no estará cocinada en el centro.
4. La elección de la fuente de calor
No es lo mismo una barbacoa hecha de tarugos de leña, de ramitas y piñas o una de carbón. Ten en cuenta que su poder calorífico es diferente y que su duración también es distinta. El carbón es lo más seguro, ya que las brasas duran mucho y mantienen una potencia constante. Aunque nuestra recomendación es utilizar leña de encina, olivo o roble ya que sus brasas tienen una gran duración.
5. Utensilios y la seguridad
Hay que tener en cuenta los elementos necesarios para su propia seguridad como pinzas largas para poder dar la vuelta a las piezas sin pincharlas, guantes para mover las parrillas y algún hierro largo para las brasas. También debe tener a su alcance un vaporizador o spray para apagar alguna llama o para refrescarse, así como una gorra para evitar la insolación.
6. El orden de los productos es importante para una barbacoa perfecta
Cada pieza de carne requiere su tiempo. Algunas carnes se cocinan antes que otras por lo que una buena planificación hará que cada alimento esté en su punto.
Coloca primero sobre la parrilla las piezas que servirán como entrantes. Los chorizos, pancetas o morcillas necesitan menos tiempo para estar en su punto. Además, mientras se asan estos alimentos pueden colocarse en las zonas periféricas de la parrilla las piezas que se asarán a continuación. Así conseguiremos que la carne se vaya haciendo poco a poco.
Después, según las vayas sacando, ve colocando las piezas más grandes que necesitarán más tiempo, para que se vayan asando mientras tus invitados se comen los entrantes.
Importante: no debemos dar continuas vueltas a la carne.
7. La sal y las especias
Uno de los errores más comunes es echar sal a la carne antes de ponerla en la barbacoa. La mejor opción es sazonar las carnes una vez cocinadas y cada uno a su gusto. Además, de esta forma la carne mantendrá su jugo y estarán mucho más sabrosas y apetecibles.
Las especias constituyen otro buen complemento. La pimienta negra, las hierbas aromáticas o el ajo en polvo darán toques diferentes a cada pieza de carne que comamos.
8. Apagado de las brasas
Cuando termine la barbacoa, tenemos que tener en cuenta que aunque las brasas parezcan muertas, probablemente tengan aún mucho calor. Si la barbacoa tiene tapa, podemos dejarla puesta para ahogar el fuego. Si no la tiene, debemos apartar el carbón y leña que no se hayan quemado y esperar a que se apaguen las brasas. Es mejor no apagar el fuego con agua, pero lo importante es dejar el fuego bien apagado, así que si hay que salir tendremos que recurrir a esa opción.
9. Limpieza de la parrilla
Para dejar la parrilla como nueva, una buena forma es pasar un estropajo metálico por cada una de sus varillas mientras mantiene el calor. Así será mucho más fácil eliminar la suciedad y dejar la parrilla en perfectas condiciones.
10. El sitio ideal para la barbacoa
Todos sabemos que cuando hacemos una barbacoa no sólo asamos la comida… ¡también nos asamos nosotros, pero de calor! Así que mejor evitar todo lo posible que además el sol nos dé en la cabeza mientras estamos cocinando la comida.
Tener una zona con una pequeña pérgola o un toldo, … Siempre será bienvenido. Así te mantendrás a la sombra mientras cocinas, además de tener la posibilidad de alargar este resguardo para que también quepa una zona de comedor. Cocinar y comer sin estar debajo de los malvados rayos del sol, siempre es un placer.
Y qué mejor forma de terminar una buena comida que dándonos un chapuzón en la piscina.